Como todos sabemos el domingo pasado, 24 de mayo, fueron las elecciones autonómicas y municipales.
Pues bien, yo todavía no tengo los dieciocho años por lo que no me tocó votar. Y sinceramente, me alegro, porque creo que es una decisión difícil y que debes de tener las cosas muy claras. Tienes que pensar que es lo que quieres, y que es lo mejor para todos.
¿Continuar como hasta ahora o hacer que las cosas cambien? Continuar como hasta ahora no creo que sea la mejor elección ya que tampoco es que nos haya ido muy bien, por lo que puede que lo mejor sea arriesgarse y probar algo nuevo, ¿puede salir bien? Claro que sí, pero también puede salir mal y si no nos la jugamos y probamos y confiamos en otras personas nunca sabremos cual es la mejor opción.
Una de las principales cosas que me han gustado de estas elecciones es que se ha podido comprobar que las cosas están cambiando, que la gente tiene otra forma de pensar y que quiere ver un cambio.
Esto último se ha podido ver con la gran pérdida de poder del Partido Popular, PP, también el Partido Socialista Obrero Español, PSOE, ha perdido bastante. La gente a preferido apostar por otros partidos que están en la sombra y que poco a poco se están dando a conocer.
A estos dos partidos que acabo de mencionar para poder estar en el ayuntamiento como alcaldes no les queda otra que negociar con otros partidos, los cuales tengan las mismas tendencias políticas, y así poder gobernar.
De esta forma se empieza a ver reflejado lo que el pueblo desea.
Con el tiempo se verá los resultados y veremos si es lo que realmente merece la pena.
domingo, 31 de mayo de 2015
Clases de filosofía
Pienso que en esta entrada no se trata ni de ser pelota ni de intentar ser el más chulo, simplemente hay que ser objetivo y decir con sinceridad lo que nos parecen las clases.
Para empezar, el primer día de clase lo recuerdo como que Enrique fue el que mejor supo acercarse a nosotros, sabía perfectamente como hablarnos y que decirnos.
A lo largo del curso Enrique nos ha ido enseñando un montón de conocimientos, tanto de filosofía como cultura general, además bastantes, que falta nos hacía.
Sus clases a mi siempre se me han hecho muy amenas y llevaderas, a parte de que siempre me lo he pasado bastante bien y las clases me interesaban, él hacía que me interesasen, por su forma de ser y de explicar. Porque sabe explicar y sabe como hacer su asignatura interesante.
Un lunes es totalmente diferente si a primera hora en lugar de tener cualquier otra asignatura se tiene filosofía con Enrique. El lunes no dejaba de ser lunes pero se veía diferente, empezabas la semana con más energía, más vitalidad, más alegría.
El último examen práctico que hicimos fue único, ¿a quién se le ocurre un martes a las ocho y media de la mañana ponernos una canción de los pitufos? La verdad es que fue un puntazo y al ver que era una canción y no un texto de algún autor mi alivio fue inmenso. Además, tenemos día de pastelitos, ¿que más se puede pedir?
Mi única "queja" es que tengo una pregunta desde la segunda evaluación y no me la quiere contestar. Pero tranquilo, se que algún día me contestaras y sabré el porqué. Menos mal que la esperanza es lo último que se pierde.
Finalmente quiero darle las gracias porque nos ha enseñado una asignatura nueva y nos ha gustado, por lo menos a mí. Se que si hubiera tenido a otro profesor seguramente no habría sido lo mismo.
Menos mal que al principio he dicho que no se trataba de ser pelota, pero sinceramente esta ha sido mi visión durante todo el curso de la clase de filosofía y de mi profesor.
Para empezar, el primer día de clase lo recuerdo como que Enrique fue el que mejor supo acercarse a nosotros, sabía perfectamente como hablarnos y que decirnos.
A lo largo del curso Enrique nos ha ido enseñando un montón de conocimientos, tanto de filosofía como cultura general, además bastantes, que falta nos hacía.
Sus clases a mi siempre se me han hecho muy amenas y llevaderas, a parte de que siempre me lo he pasado bastante bien y las clases me interesaban, él hacía que me interesasen, por su forma de ser y de explicar. Porque sabe explicar y sabe como hacer su asignatura interesante.
Un lunes es totalmente diferente si a primera hora en lugar de tener cualquier otra asignatura se tiene filosofía con Enrique. El lunes no dejaba de ser lunes pero se veía diferente, empezabas la semana con más energía, más vitalidad, más alegría.
El último examen práctico que hicimos fue único, ¿a quién se le ocurre un martes a las ocho y media de la mañana ponernos una canción de los pitufos? La verdad es que fue un puntazo y al ver que era una canción y no un texto de algún autor mi alivio fue inmenso. Además, tenemos día de pastelitos, ¿que más se puede pedir?
Mi única "queja" es que tengo una pregunta desde la segunda evaluación y no me la quiere contestar. Pero tranquilo, se que algún día me contestaras y sabré el porqué. Menos mal que la esperanza es lo último que se pierde.
Finalmente quiero darle las gracias porque nos ha enseñado una asignatura nueva y nos ha gustado, por lo menos a mí. Se que si hubiera tenido a otro profesor seguramente no habría sido lo mismo.
Menos mal que al principio he dicho que no se trataba de ser pelota, pero sinceramente esta ha sido mi visión durante todo el curso de la clase de filosofía y de mi profesor.
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